Dos días completos de descubrimiento y observación de vida silvestre en una de las reservas más hermosas de Kenia e incluso de África. La reserva linda con el vecino Parque Serengeti, que está separado solo por el río Mara. A primera hora de la mañana, nos vamos de safari para presenciar el despertar de la sabana. Juegos de luz y sonidos inusuales están en el programa. Masai-Mara cubre 1500 km² y debe su nombre al pueblo Masai y al río Mara que lo atraviesa. Es un Arca de Noé donde se encuentran todos los animales de la sabana. Rinocerontes negros, viejos elefantes, hipopótamos, cebras, flamencos, leones y hienas, todos conviven allí, en completa libertad.